Para devolver la función a un músculo paralizado se utilizan transferencias tendinosas. El procedimiento consiste en desviar un músculo activo llevando su tendón al del músculo paralizado para restablecer su función. La transferencia tendinosa más utilizada en la extremidad superior se realiza para restablecer la extensión activa de la muñeca . Después de la cirugía se requiere de inmovilización por 4 semanas, seguida de reeducación tres veces a la semana por el período de dos meses. La reeducación es esencial para el éxito de la operación.